Miguel Baeta se unió a Crossjoin en 2017 como consultor y con la voluntad de abrazar un proyecto internacional.
El destino propuesto al llegar a Crossjoin era Inglaterra, hace tres años, y el reto era integrar nuestro equipo que trabaja directamente con nuestro cliente – una empresa de telecomunicaciones.
«Trabajar directamente con el cliente es gratificante, por la dinámica que existe, el desarrollo personal al tratar con nuevas personas y el ritmo con el que aparecen las nuevas tecnologías». Dice nuestro Crosser.
Dice o Miguel.
Ha sido una colaboración duradera entre Crossjoin y la compañía de telecomunicaciones. Crossjoin cuenta con un equipo in situ dedicado a las diversas áreas y cuenta con el excelente apoyo del Centro de Competencia, que es fundamental para superar los obstáculos que se presentan. Crossjoin ha demostrado su valor, siendo un importante activo para los sistemas de los clientes y también proporcionando resultados tangibles.
l apoyo que hemos estado brindando al cliente ha demostrado beneficios claros en varias áreas – desde los sistemas de CRM, facturación, integración donde comenzó nuestro trabajo, hasta las áreas de pruebas de rendimiento o incluso el área digital y la infraestructura de la nube.
Miguel se enorgullece de participar en estos desafíos que le han hecho crecer mucho.
Este no es el primer desafío profesional internacional de Miguel. La primera vez fue hace 13 años en Luanda, Angola. En ese momento sintió una gran diferencia en términos de cultura de trabajo y aprendizaje y resultó en una experiencia muy valiosa en su carrera profesional. Desde esa experiencia, su gusto por el contacto con otras culturas ha permanecido.
Aunque en el Reino Unido no hubo mucho impacto cultural, Miguel nos dijo que también tuvo que adaptarse a ciertas situaciones.
Lo más difícil en su adaptación al país fue el clima. Llegó al Reino Unido, más precisamente a Newbury, a finales de enero y aunque las casas y establecimientos tienen calefacción, en la calle se siente bastante frío.
También confiesa que extraña a su familia y amigos en Portugal, pero dice que sus compañeros ayudan a «matar» esta nostalgia de Portugal, ya que nunca dejan de hablar el idioma portugués y terminan «encontrando un poco de casa fuera de casa».
Tanto en el plano personal como en el profesional, el espíritu de ayuda y apoyo mutuo entre los Crossers está siempre presente y esto es formidable, dice Miguel. «Por cierto, es este espíritu de equipo y apoyo que caracteriza a Crossjoin tanto que lo valoro más en nuestra empresa. Sé que si me encuentro con algún obstáculo personal o profesional, contaré con todo el apoyo del equipo”.
Gracias, Miguel.
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